Novedades al Podcasting 2.0 en Haciendo el Sueco

Poco a poco voy integrando las herramientas del podcasting 2.0 en Haciendo el Sueco.

En el último «Haciendo el Sueco» añadí transcripción y capítulos, hoy he activado «Value 4 value» mediante Alby, de esta forma puedes donar «sats» en «Haciendo el Sueco» y «Haciendo el Sueco Antología», para hacerse una idea del valor de los «sats», 1000 sats equivalen a 0,30€. Puedes aportar estos sats desde la web o también desde las últimas aplicaciones de podcasts que encontrarás en esta lista.

Por otro lado lado «Haciendo el Sueco» como «Haciendo el Sueco Antología» están en Podchaser de esta manera los podrás valorar y añadir reseñas.

Comparte en:

Ya tenemos la nuevo GoPro 12

El jueves 7 de septiembre GoPro presentó su nueva cámara que llega a su versión 12. En este podcast repasamos sus características más importantes donde además valoro si merece la pena en comparación con la también reciente DJI Osmo Action 4 y la ya antigua Insta360 One R con la lente de 1 pulgada.

Comparte en:

Haciendo el Sueco es ya podcast 2.0

Nos metemos de lleno con el futuro del podcasting, el podcast 2.0 con capítulos, comentarios centralizados y mucho más.

Si quieres descargarte las aplicaciones más modernas para escuchar podcasts, las encontrarás aquí: https://podcastindex.org/apps

Comparte en:

DJI Osmo Action 4 & Røde Wireless Pro

Volvemos! y lo hacemos hablando de la DJI Osmo Action 4 (https://youtu.be/0fQv_0lRhD4 y https://youtu.be/U_lzjuD0KpI) y los micrófonos inalámbricos de Røde, los Wireless Pro.

Toda la información del podcast en https://www.haciendoelsueco.com/

Send in a voice message: https://podcasters.spotify.com/pod/show/hesmedia/message

Comparte en:

Vergüenza ajena

Desde que vivo en Suecia, a partir de principios de 2010, me he dado cuenta de que muchas de las noticias que ocurren en España no trascienden más allá de sus fronteras. He observado que eventos como los desvaríos del miembro de la familia real no han recibido mucha atención, y el «procés» fue abordado de manera relativamente moderada. Sin embargo, lo que parece estar captando la atención no pasa desapercibido: el asunto de la selección femenina de fútbol y la controversia en torno a Rubiales. Incluso entre mis colegas de trabajo aquí, el tema es ampliamente conocido, y el veredicto es unánime: debe presentar su dimisión. Con cada día que pasa, la indignación se intensifica, lo cual representa un duro golpe para la reputación de España.

Pero el machismo en España no se limita al mundo del fútbol; más bien permea gran parte de las organizaciones, empresas y entidades oficiales. En ocasiones, el racismo y la homofobia también emergen en toda su crudeza, y esto no es algo exclusivo de personas mayores, sino que también es evidente en la generación joven y educada. El machismo no es solo una característica generacional, sino que sigue arraigado en la cultura a todos los niveles.

Numerosas amistades han compartido experiencias de tratos denigrantes en el ámbito laboral debido a su género. No obstante, las problemáticas no se detienen ahí. En mi caso, fui objeto de burla en mi trabajo anterior en España debido a mi orientación sexual, y mi queja al respecto resultó en mi despido. Tras este incidente, decidí abandonar el país. No he sido el único en migrar de España por razones similares; tengo varias amistades que han enfrentado la homofobia, el machismo, la xenofobia o el racismo en carne propia. Cuando les pregunto si desean compartir sus experiencias, su respuesta es unánime: «no vale la pena». Han optado por resignarse, ya que sus quejas siempre han sido contestadas con la misma respuesta: «si te encuentras tan bien en tu nuevo país, quédate allí». En lugar de introspección y esfuerzos para construir una sociedad más equitativa para todos, esta respuesta prevalece.

Todo esto me recuerda a un programa de televisión en el cual periodistas viajaban por el mundo para entrevistar a españoles. En uno de los programas, entrevistaron a un español establecido en Suecia que trabajaba como político en el ayuntamiento de Estocolmo. En el primer programa, mostraba una actitud colaborativa y amigable. Sin embargo, tras unos años, se repitió el destino y se intentó entrevistar a las mismas personas que habían participado en el programa anterior. En esta ocasión, el señor atendió a los presentadores en la calle y expresó que no deseaba tener nada que ver con España. Argumentó que no estaba obligado a rendir explicaciones ante un público que percibía como ajeno a su realidad.

Al observar noticias sobre machismo, homofobia, racismo, corrupción, entre otros problemas, aquellos de nosotros que vivimos fuera de España perdemos la motivación para sentirnos orgullosos de nuestra tierra natal.

Comparte en:

DJI Osmo Action 4, la review que se adentra en una característica olvidada

Comparamos la DJI Osmo Action con la Insta 360 One R y su lente de 1 pulgada y con la Sony ZV-E10 y además nos adentramos en una característica que es olvidada por mucha gente, aunque en este caso, encontramos que la cámara tienen un problema de base. 8bits – 10 bits: https://www.youtube.com/watch?v=l9q8ln6KVJA Hace mecenas en Patreon! https://www.patreon.com/proteusbcn

Comparte en:

Rico en Skeppsholmen

Comparte en:

La extinta comunidad podcaster

Desde los albores del 2005, hace más de 18 años, me sumergí en el mundo del podcasting. En aquel entonces, en España, los podcasters se podían contar con los dedos de una mano (de Homer Simpson).

El tiempo ha volado y durante casi dos décadas, hemos pasado de que prácticamente nadie supiera lo que era un podcast, a que sea extraño no encontrar entre tus amistades a alguien que esté involucrado en la creación o colaboración en alguno.

Pero, ¿es el podcasting de hoy el mismo que el de antaño? En su mayoría, no lo es. En los últimos años, especialmente tras la pandemia, hemos sido testigos de una profesionalización del medio, que trasciende fronteras y se refleja no solo en España, sino a nivel global.

El cambio más palpable radica en la transición de un modelo de podcasting abierto a uno más cerrado y exclusivo, además de un cambio de enfoque colaborativo a uno más individualista. Algunos podrían incluso decir que el podcasting ha asumido rasgos del modelo radiofónico, adoptando tanto lo positivo como lo negativo de esta influencia.

La profesionalización del podcasting es innegable y ha brindado ventajas notables como mayor calidad, diversidad y la democratización del medio. Sin embargo, este proceso de búsqueda de monetización ha traído consigo la disolución de la comunidad original que floreció en los inicios. En lugar de la camaradería que caracterizó los primeros tiempos, se ha instaurado un ambiente de competencia, donde los podcasters luchan por su propio éxito, a menudo descuidando la colaboración y el apoyo mutuo.

Un aspecto negativo adicional que ha surgido es la creciente sobreexplotación del medio. Ha habido un cambio de crear podcasts por pura pasión a hacerlo con fines lucrativos, invitando a celebridades que, en muchos casos, carecen de conocimiento sobre el podcasting, con el único objetivo de que la audiencia pague por acceder al contenido exclusivo en determinadas plataformas. Esto se complica aún más al considerar a ciertos «gurús» del podcasting que, paradójicamente, criticaron la esencia del medio en sus comienzos, pero ahora se presentan como sus abanderados, o peor aún, aquellos que intentan reescribir la historia del podcasting en España, autoproclamándose como los únicos conocedores verdaderos del medio.

Es importante reflexionar sobre la esencia del podcasting. Según el creador del término, Adam Curry, «un podcast es un programa multimedia al que puedes suscribirte y reproducir en cualquier dispositivo o aplicación compatible. No puede considerarse un podcast si no está disponible para una aplicación de podcast basada en RSS». Estas palabras recuerdan la verdadera naturaleza de la plataforma, independientemente de cómo se le llame.

La nostalgia por la comunidad solidaria de los primeros días es comprensible. La colaboración, tutoriales, intercambios y proyectos conjuntos crearon una base sólida. A pesar de que algunas iniciativas han desaparecido o se han desviado hacia el individualismo, todavía hay ejemplos inspiradores de apoyo a podcasts amateurs, donde la creación y disfrute son los principales motores, como lo demuestra el podcast «Los últimos de Feedlipinas».

En resumen, el podcasting ha evolucionado significativamente. Aunque los cambios han sido profundos, el corazón de esta forma de expresión persiste. Pese a las barreras que puedan surgir, siempre habrá apasionados dispuestos a crear podcasts por amor al arte, sin preocuparse por la monetización ni la fama.

Comparte en: